Sin duda, en esta 56º edición, Sara Coleman nos conquista con su nueva propuesta en la que nos ha hecho bucear en las profundidades marinas mediante esa música que nos invita a bucear en los tejidos orgánicos y prendas ligeras tan propias y personales de sus colecciones.
No es para menos entonces que saltara de alegría a lo largo de la pasarela tras el desfile, ya que como siempre se ha implicado de lleno en esta colección y por lo tanto ha recibido muy buena aceptación.
En la colección podemos ver vestidos sueltos, blusas oversize y sus característicos pantalones baggy. Sus formas son casi simétricas y utiliza un solo estampado que nos recuerda al océano. Luego utiliza colores neutros contrastando con naranjas y amarillos. El azul es es casi imprescindible en sus colecciones. Sus líneas suaves se mezclan con los tejidos.
Además es una colección muy ponible y muy fresca.
Desde luego a mi me ha encantado.
No te perdemos la pista, Sara!